Fui a ver 4 películas del Green Film Festival de Buenos Aires. Dos de ellas merecen mención en este post.
"The Age of Stupid" ("La Era del Estúpido", 2009, Reino Unido, dirigida por Franny Armstrong) está ubicada en un futuro apocalíptico de 2055, y básicamente dice que fuimos unos estúpidos porque tuvimos los elementos para salvarnos y no lo hicimos.
Cero propuesta. ¿Qué tuvimos para salvarnos?
Aparece por ahí en una instantánea el auto eléctrico, en un huracán de imágenes.
"Home", dirigida por el fotógrafo paisajista Yann Arthus-Bertrand, te muestra con bellísimas imágenes el origen y el posible futuro catastrófico de nuestro hogar la Tierra.
La conclusión tras verla se la dejo a una niña de unos 11 años que estaba sentada en la butaca de al lado: "Me dio mucha tristeza", dijo.
Y claro, sin proponérmelo confirmé una antigua hipótesis.
Muchos eco-documentales parecen hechos ex profeso con el fin de paralizar a la gente.
Te dejan un
¿Y ahora qué? ¿Qué debo hacer yo?
¿Yo soy culpable de que el mundo se vaya al caño?
Si tan urgidos estamos de soluciones drásticas, ¿por qué no aparece un gran documental super producido como éstos sobre el auto eléctrico, creado en 1996, y que es una tremenda solución para reducir las emisiones de CO2 y comenzar a sanar la atmósfera?
Los millones de dólares que se han gastado en estos documentales pudieron haberse utilizado investigando y editando un extenso documental con la infinidad de material que hay en la web sobre los autos eléctricos y el boicot que sufren por las petroleras.
Ne O
1 comentario:
Neo, tienes toda la razón, yo también me he hecho esa pregunta, ¿y si realmente está todo bien y lo único que hacen es vendernos que estamos cerca del apocalipsis para vender sus documentales...?
Sería como esos libros setentosos sobre los ovnis y el Triángulo de las Bermudas...
También pienso que los hacen gente que viven en países europeos ricos que no tienen problemas ecológicos, con mucha plata, y que les importa nada seguir usando petróleo.
Ali
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